martes, junio 07, 2005

Una carta perdida en el tiempo

Querido mio

Hoy que tu corazón se encuentra distante, el mio me impulsa a escribirte anhelante de tu presencia.

Te escribo con la certeza de que a diferencia de mis manos, estas letras (inspiradas en mi sentimiento y materializadas por las mismas) podran acariciarte tan suavemente que logren llegar casi de forma imperceptible a esa caldera tuya llamada corazón, sin otro objetivo más que hacerte sentir la misma cálidez que recorrería tu cuerpo de ser estas mis caricias.

Hoy mis brazos jugándome una mala pasada me han hecho pensar en ti, de mi cintura donde perfectamente acoplan tus fuertes manos; decir que te recuerdan es poco o nada porque realmente te extrañan, te anhelan, te desean y en cada soplo del viento te buscan como si supieran que este mensajero universal trae algo para mí…

Esta pequeña nota se ha escapado de mi corazón igual que un suspiro lleno de sentimientos, y en espera que sepas perdonar el tono rosa apasionado de mis palabras, me despido diciendo tu nombre como un suave y cálido beso porque desde hoy te llamaré Amor…

OST = Evanescence - My inmortal

1 comentarios:

vf dijo...

Me encantó que haya pasado por mi pequeño espacio, sobre el tiempo perdido. A mi también me encantan los delfines.
Interesante sentimiento en esta carta perdida en el tiempo...
Anlazé tu blog en mis links intemporales....